lunes, 16 de junio de 2008

Móvil para todo


780 gramos. Es lo que pesaba uno de los primeros teléfonos móviles del mundo en el año 1983. Hace 4 meses un pequeñísimo móvil llamado Modu entraba en el libro Guiness de los Récords por pesar tan solo 40 gramos.

Pero aunque de agradecer, no todo ha sido mejoras en el peso y tamaño de los móviles. Durante todos estos años se han desarrollado multitud de servicios alrededor de dichos dispositivos. Servicios tales como la mensajería SMS, agenda electrónica, juegos cada vez más perfeccionados, los famosos tonos, politonos y resto de melodías, sincronización de datos entre diferentes terminales, manos libres y un largo sinfín de mejoras tecnológicas que, incluso, nos han permitido poder reproducir música y video en nuestro móvil, usarlo como mando a distancia en nuestro salón, pagar en comercios, tomar fotografías en cualquier momento y en cualquier lugar y orientarnos en nuestro coche utilizando el GPS de nuestro terminal, provocando en algunas ocasiones que nos olvidáramos del uso inicial para el que nuestro móvil había sido diseñado. El recién presentado iPhone es un buen ejemplo de ello y hasta en su publicidad televisiva recuerdan que también se puede utilizar como teléfono. Increíble.

Y como en todo dispositivo tecnológico que se precie, la gran revolución llegó con Internet. Gracias a la llegada de Internet a los móviles podemos navegar, enviar correos electrónicos y descargarnos contenidos. La evolución del móvil hacia una plataforma de ocio portátil se ha hecho realidad. Prueba de ello es que ya es posible sintonizar canales de televisión en nuestro móvil y verlos mientras viajamos en el tren o disfrutamos del sol en la playa. En España, como siempre, tendremos que esperar todavía a que la tecnología y el mercado maduren, pero en Japón ya hay 20 millones de usuarios que ven la televisión a través de su móvil.

Pero no todo es entretenimiento. También los móviles pueden prestar un gran servicio a la sociedad. ¿Cómo? Desde hace algún tiempo existen en diferentes operadores y diferentes países servicios de localización de personas a través del móvil. Simplemente dándonos de alta en el servicio, facilitando nuestro consentimiento de poder ser localizados e indicando aquellas personas que podrán hacerlo, nuestros familiares pueden encontrarnos en cualquier lugar que estemos (siempre que nos encontremos junto a nuestro móvil, claro está). Es un gran servicio para familias con niños pequeños, con personas mayores, con problemas cognitivos, con discapacidad o bien pacientes con Alzheimer.

Mientras tanto, Nokia, Nec, Sony y otros fabricantes están ya diseñando nuevos modelos y nuevas funcionalidades para el futuro. Móviles con pantalla táctil de alta definición, fabricados con materiales flexibles o bien con forma de brazalete son un ejemplo claro de las tendencias en el sector. En la web http://www.cellphonebeat.com/entry/top-10-concept-phones/ se pueden observar diez prototipos de diferentes fabricantes. Y como la realidad supera a la ficción, ¿en cuantas películas futuristas hemos visto al protagonista comunicarse a través de su reloj? Pues bien, ya podemos hacerlo. Fabricantes asiáticos han sacado al mercado los modelos Hyunday W-100 y CECT W-100 que, con forma de reloj, funcionan también como móvil. Y LG está a punto de lanzar el suyo, el LG Wath Phone.


Pero no solo existen clientes que desean todas estas nuevas funcionalidades y servicios. Y los fabricantes lo saben. La mayoría de ellos últimamente están volviendo a desarrollar modelos de móviles básicos y sencillos, sobretodo dirigidos a gente mayor y niños, o bien para gente que solo quiere llamar y recibir llamadas sin dejarse llevar por la fiebre de las nuevas tecnologías. Y es que como alguien dijo, “el último paso de la sofisticación debe ser la sencillez...”