
La pérdida de datos representa pérdida de negocio y poco a poco esta mentalidad ha ido experimentando un cambio progresivo. Muchas empresas han entendido la criticidad de la disponibilidad de sus datos y han comenzado a implantar políticas de copias de seguridad y restauración, mejorando de esta manera su posible Plan de Recuperación ante Desastres (DRP).
Actualmente, gracias a que los precios de las telecomunicaciones se han visto reducidos y que los operadores han ampliado su capacidad, el concepto de copia de seguridad va incluso mucho más allá. Ahora ya es posible realizar copias de seguridad en remoto contra un Centro de Datos a través de Internet, de una forma totalmente fácil, segura y fiable obteniendo al mismo tiempo una capa de servicios complementarios como la monitorización de las copias realizadas, la posible custodia de los datos en cinta física dentro de una cámara acorazada y la recuperación de datos ante desastres, bien en remoto o bien trasladando los datos de nuevo a casa del cliente.
Estos factores han provocado un aumento en la demanda de servicios de Backup Remoto. Este incremento se materializa en los últimos datos de IDC, donde se indica que el mercado de servicios de Backup Remoto a nivel mundial está experimentando un importante crecimiento entre 2007 y 2011, con una tasa de crecimiento anual compuesto del 33,3%.
El Backup Remoto además garantiza el cumplimiento de la Ley Orgánica de Protección de Datos (LOPD), ya que permite tener los datos de forma encriptada fuera de la empresa. Por esto el Backup Remoto se convierte en una herramienta básica para cualquier empresa que desee realizar un Plan de Recuperación de Desastres y cumplir las actuales normativas vigentes.